EL CREDO DE LA SEGURIDAD
Nuestros clientes
son la razón por la que todos nosotros estamos en este negocio.
Por eso, la forma
que nos vean, a través de una buena imagen y la manera que respondamos a sus
necesidades, con la máxima calidad de productos y servicios, nos permite
diferenciarnos de la competencia y tener éxito en nuestro trabajo.
Todos compartimos
la responsabilidad de demostrarle al consumidor que estamos verdaderamente
comprometidos con él, sin importar cuál sea nuestra tarea.
El desafío para
todos es que nuestra imagen y calidad de productos y servicios supere todas las
expectativas de los clientes. Solo nuestros esfuerzos y un eficiente trabajo de
equipo lo pueden hacer realidad.
Somos
responsables ante nuestros empleados, los hombres y mujeres que trabajan con
nosotros. Todos deben ser considerados como individuos. Debemos respetar su
dignidad y reconocer sus méritos. Han de tener una sensación de seguridad en
sus trabajos. La compensación ha de ser justa y adecuada, y las condiciones de trabajo,
limpias, ordenadas y seguras. Debemos ser sensibles en la manera en que podemos
ayudar a nuestros empleados en el cumplimiento de sus obligaciones. Nuestros
empleados han de sentirse libres para hacer sugerencias y formular sus quejas.
Debe haber las mismas oportunidades de empleo, desarrollo y promoción para
aquellos que estén cualificados. Debemos proveer una dirección competente, y
sus acciones deben ser justas y éticas.
Somos
responsables ante las comunidades en las que vivimos y trabajamos Debemos ser
buenos ciudadanos, apoyar las buenas obras y la caridad, y pagar nuestra parte
equitativa de los impuestos. Debemos promover las mejoras cívicas, sanitarias y
educativas. Debemos mantener en buen estado los bienes que tenemos el
privilegio de utilizar, protegiendo el medio ambiente y los recursos naturales.
Nuestra
responsabilidad final es para con los accionistas. Nuestro negocio ha de
mantener un beneficio sólido. Debemos experimentar con nuevas ideas. Se debe
investigar, desarrollar programas innovadores y pagar por los errores. Deben
adquirirse nuevos equipos, proporcionarse nuevos medios y lanzarse nuevos
productos. Se deben crear reservas para hacer frente a tiempos adversos. Si
actuamos de acuerdo a estos principios, los accionistas han de obtener una
retribución justa.