viernes, 29 de junio de 2012

5ta Charla Mes Junio


CADA PROBLEMA EN SU LUGAR
Trabajar en ocasiones resulta complicado, hay días más difíciles que otros, es posible que nuestras metas de producción no se cumplan como quisiéramos y esto al final genera estrés y frustración.

         

Además en ocasiones nuestros asuntos personales y las dificultades familiares pueden llevar a que esos niveles de estrés y frustración aumenten.
Algunas veces, esas situaciones hacen que lleguemos a ser agresivos, distraídos y perder el control de las situaciones, cosa que en realidad no debe suceder.
En esos casos de alto estrés, lo mejor es mantener la calma, concentrarnos en el trabajo y evitar enfrentamientos.
En alguna oportunidad un trabajador se quejaba furiosamente ante un médico que le recomendó retirarse del hospital en el que se encontraba un ser querido en estado muy grave diciéndole: “estando en este hospital, usted no puede hacer nada para mejorar la situación de salud de su ser querido. Es mejor que se calme, vaya a su trabajo y se concentre en hacerlo correctamente”
En principio esto puede sonar muy duro o inhumano, pero el consejo del médico es apropiado. Si tenemos una situación externa que nos está generando problemas, lo mejor que podemos hacer es evitar que esa situación empeore otros aspectos de nuestra vida.
Si tenemos problemas, actuemos para solucionarlos, en lugar de complicar las demás cosas a cuenta de éste. En los casos en que la solución no está en nuestras manos -como la salud de un ser querido, para dar un ejemplo- mantengamos la calma y conservemos cada problema en su lugar.
A la hora de trabajar concentrémonos en nuestro trabajo, evitemos distracciones y con esto, problemas o enfrentamientos.

          
    
¿Qué pasa si nos distraemos y sufrimos un accidente?
Simple: Ya no tendremos un problema, sino dos o posiblemente más. Ya no tendremos un ser querido en el hospital, sino que podríamos estar nosotros también allí, con las consecuencias adicionales que eso podría tener, como la pérdida de nuestros ingresos, más el tiempo de recuperación y las preocupaciones adicionales a nuestros seres queridos.
Tengo muy claro que es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero no por esto debemos dejar de hacer nuestro mejor esfuerzo intentándolo.
Permitir que el estrés y los problemas afecten el resto de nuestra vida no es buena idea